¿Qué hay detrás de la toma en el Parque Nacional?

Son más de 20 días los que ha durado la ocupación ilegal en el Parque Nacional por parte de diferentes comunidades indígenas que exigen garantías para su permanencia en Bogotá y que no han logrado un acuerdo con el gobierno Distrital debido a la intervención de falsos líderes que obligan a su permanencia indefinida en el lugar, según denunció la concejal Lucía Bastidas Ubaté.

Para la cabildante, si bien, varias de las peticiones de las comunidades son totalmente legítimas, como las de otras poblaciones vulnerables presentes en la ciudad, lo que se ha conocido con el paso de los días es que hay intereses particulares que se lucran de la necesidad de estas personas, y evitan que se adelante una negociación, e insisten en presentar un pliego de exigencias, algunas que no son posibles de cumplir, a costa de mantener de forma indefinida a mujeres y adultos mayores a la intemperie, sin condiciones básicas de salubridad e instrumentalizando menores para la protesta, poniendo en riesgo su integridad.

“Según el presidente de la Asociación de Cabildos Indígenas Emberá Katío del Departamento del Chocó, Alfredo Queragama Cheche, personas inescrupulosas se están haciendo pasar por líderes de la población en el Parque Nacional, para desestabilizar a las comunidades y el orden de sus organizaciones. Por medio de varias cartas dirigidas al gobierno Nacional y Distrital,  reiteró que se trata de personas de la comunidad que se declaran víctimas del conflicto armado, sin serlo y de esta manera evitar el retorno a sus zonas de origen, exigiendo condiciones que no son de su caso, quitándole oportunidades a las verdaderas víctimas”, dijo la concejal.

Y agregó: “La misma asociación, ha manifestado que contrario a lo que representa su cultura; estos falsos líderes se encargan de explotar a niños y mujeres en la ciudad, haciendo que abandonen sus prácticas ancestrales y llevándolos a ejercer la mendicidad, la drogadicción, la prostitución, a ser expuestos a abusos sexuales, maltratos físicos y psicológicos. Como consecuencia, pierden su dignidad, olvidan su lengua y se sumen en la pobreza”.

En poder del Ministerio del Interior, de Defensa, de Hacienda, del Departamento Administrativo de Prosperidad Social y de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, reposan las cartas conocidas por la concejal Bastidas y que ha enviado la organización Embera, legalmente constituida, en las que solicitan que los procesos no se vean perjudicados al reconocer falsos liderazgos que no representan a su comunidad, como el del señor Leonival Campo, quien de acuerdo a los comunicados de la Asociación de Cabildos no es reconocido como autoridad indígena e incentiva a casi 1200 indígenas Embera Katio a permanecer en el Parque Nacional.

En Bogotá no se puede permitir que ganen terreno estos falsos liderazgos o las tomas ilegales que dañan los espacios y el ambiente, que esconden intereses particulares e incluso políticos aprovechándose de comunidades vulnerables que cargan con una real necesidad que puede ser atendida mediante el dialogo social con condiciones, sin violencia. Por eso, respaldo la decisión de trasladar a un albergue digno a los indígenas Embera, porque algunos vividores que se autodenominan líderes, aprovechándose de estas familias, desconocen que si les están ofreciendo posibilidades que han rechazado; la caracterización será fundamental para dar ayuda a cada persona. Así como es necesario que tan pronto se adelante ese proceso se inicie la recuperación del Parque que ha sido objeto de tala de árboles, contaminación del Río Arzobispo y basuras. No se debe ceder a chantajes de algunos vivos”, puntualizó la concejal del Partido Alianza Verde.