Cuarentena estricta no es una opción, lo estricto deben ser los controles

La ciudad no puede retroceder. En general, en el país las ciudades han logrado de a poco controlar la velocidad del contagio y la mortalidad en sus territorios, y es que de eso se trataba, de tomar estos meses para planear, evaluar y tomar decisiones que nos permitieran retornar a una nueva normalidad. Así como se destaca el caso de Medellín, donde se hizo una gestión a través del análisis de datos para hacer los cercos epidemiológicos de manera oportuna, la identificación y el seguimiento; además de los controles de la mano de las autoridades en el momento en que se debían hacer, indicó hoy la concejal de Bogotá, Lucía Bastidas, al tiempo que llamó a la Administración Distrital a evaluar su solicitud al gobierno nacional de volver al aislamiento.

“Bogotá, no está en condiciones de aguantar una cuarentena estricta. La salud mental de los ciudadanos y el aparato productivo están afectados; la reactivación económica es una necesidad luego de meses de aislamiento y cierre de establecimientos, los empresarios, emprendedores, dueños de cafeterías, peluquerías, y otras actividades no pueden salir más afectados por la falta de autoridad en el cumplimiento de las medidas. Desde el Concejo, en repetidas ocasiones hicimos el llamado a diferentes entidades para que prestaran atención a los focos de contagio que se estaban presentando a los alrededores de Corabastos: en María Paz o en El Amparo; así como en el centro, en sectores como la Carrera Séptima y San Victorino; donde las aglomeraciones por cuenta de la venta ambulante sin protocolos, sin distancia, ni tapabocas, traía a gente de todas las localidades. Sin duda, esa situación contribuyó a que hoy Kennedy sea la localidad con más presencia de Covid-19 y que en la ciudad el virus se haya diseminado rápidamente”, manifestó la Concejal del partido Alianza Verde.

Para Bastidas, falló la planeación, con una serie de medidas a las que no se les hizo seguimiento ni control, aunque los bogotanos las cumplieron en una inmensa mayoría, en un compromiso para darle tiempo a la Alcaldía de gestionar el buen funcionamiento del sector salud en una pandemia que desde el principio se proyectaba que tendría su pico más alto a mitad del año. “Teníamos que anticiparnos y actuar; no como se solicita ahora cuando estamos a algo más de un 1% de la capacidad alerta de ocupación de UCI, retornar a un aislamiento obligatorio y cese de actividades por completo. Lo estricto, deben ser los controles, tuvimos una cuarentena y tiempo suficiente para adaptar los protocolos, para organizar la ciudad”.

“Hoy se puede concluir que fracasó la planeación y gestión de la Alcaldía en intentar contener y dar buen manejo a la emergencia, fracasamos todos los ciudadanos porque no trabajamos en el autocuidado, el Covid-19 vino para quedarse. Ahora, se debe asumir la responsabilidad, de nada sirve a estas alturas echar culpas tratando de justificar lo injustificable. La gestión frente al Covid-19 y los controles dependían del gobierno Distrital. Se debe retomar el trabajo de prevención, la reactivación económica debe continuar con los protocolos que se decretaron, el cumplimiento de las normas en la calle deben ser en verdad vigilada por las entidades correspondientes, necesitamos protocolos para la reapertura de los restaurantes que se están declarando en quiebra porque no han tenido oportunidad, también para los parques como sitios seguros y con bioseguridad para que no haya personas expuestas en las calles donde el cuidado es mínimo, ni más demora en las ayudas y la seguridad para los ciudadanos debe ser una realidad en medio de la pandemia. Eso es lo que debe ser estricto”, puntualizó la Concejal.

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