“Falló la estrategia”: Lucia Bastidas
Esto es lo que manifestó la Concejal de Bogotá, Lucía Bastidas,” es claro que la Administración falló en el cálculo de UCI que debería tener para esta época; la alcaldesa Claudia López había prometido que para el mes de mayo se contaría con 4000 UCI en el Distrito, a la fecha se cuentan únicamente con 1296 disponibles para COVID 19, de las cuales 1164 están siento utilizadas, con una ocupación de UCI del 89,8%, en el momento, las UCI generales que se encuentran habilitadas son: 1376 de la red privada y sólo 280 son de la red pública. De haberse cumplido con la meta inicial, el porcentaje de ocupación sería inferior, y Bogotá no estaría bajo una cuarentena extendida que cambia semana a semana perjudicando no solo la salud sino la economía. “
El dilema de Corferias para pacientes Covid-19 asintomáticos
Uno de los principales cuestionamientos recae sobre Corferias, un Centro Hospitalario Transitorio para el que se firmó un contrato de más de 200 mil millones de pesos para atención No-Covid, y el resultado de este espacio habilitado desde el 20 de abril, son 185 pacientes atendidos a la fecha, 48 que permanecen hospitalizados, lo que no corresponde a la atención o inversión de un espacio que se había dotado para 2.000 camas y que tiene en su personal 210 contratistas por OPS, de los cuales 174 son asistenciales y 36 de apoyo administrativo.
“Ahora, ante la emergencia sanitaria desbordada, con casos como el del área de urgencias del Hospital Santa Clara, la Administración decide que atenderá durante este tiempo que le resta al convenio, pacientes de Covid-19 asintomáticos, pero responde la Secretaría de Salud que aún están construyendo los lineamientos para recibir a los contagiados. No se tiene prevista un área intermedia si es el caso de que pacientes asintomáticos se compliquen o presenten síntomas. Corferias no tiene adecuación de gases que requerían los pacientes en caso de evidenciar síntomas durante su permanencia y si generan gran riesgo de convertirse en un nuevo foco de contagio para las otras personas que no tienen el virus y que están siendo atendidas en este lugar. Es un gasto innecesario disponer camas y centros hospitalarios así sean transitorios, para pacientes que no requieren asistencia médica.
Si tuvimos una cuarentena estricta, ¿por qué los protocolos no están listos? Hay que evaluar cuál ha sido el costo-beneficio, si hubo sobrecostos, no considero que Corferias sea la mejor opción para atender a pacientes diagnosticados con el virus; era un tema que debió considerarse desde el inicio, incluso la posibilidad de destinar un hospital de tercer nivel para atención exclusiva de Covid-19 con instalaciones, recursos técnicos, humanos y financieros al servicio de los bogotanos cuando más presencia de contagios presentara la ciudad. No se hizo, no se pensó y ahora se improvisa”.
¿Un Top de contratación en el sector salud?
Otro aspecto que alerta y levanta sospecha es la concentración de la contratación del sector en un grupo específico; se trata de 13 empresas y siete personas naturales con convenios suscritos con las cuatro subredes de la ciudad, por montos superiores a los 16 mil millones de pesos. Llama la atención además que en algunos casos se trate de un mismo contratista para diferentes aspectos, como ocurre con un caso en particular de una persona natural que ha logrado en estos meses 18 contratos por 5.600 millones de pesos, por suministro de medicamentos, otros por operación logística y unos más por asesoría y acompañamiento a procesos precontractuales.
Le he solicitado a la Personería que se pronuncie sobre estas dudas y que se revise la democratización de la contratación porque en medio de la crisis muchas empresas migraron a este tipo de servicios de salud y es una manera de garantizar la equidad. Que se vigilen las condiciones para que mucha gente y empresas puedan participar y defender los recursos públicos.
Al parecer la cuarentena no sirvió para el alistamiento, nos concentramos en la pugna política en la pandemia, con discusiones públicas innecesarias, que distrajeron del objetivo y que en nada le aportan a la ciudad para superar la emergencia y a salvar vidas. O, ¿por qué en pleno pico de la pandemia no se tiene un espacio preparado para los pacientes complejos que puedan presentar complicaciones? ¿Por qué se esperó hasta llegar al 90% de ocupación de UCI para habilitar un espacio que se ha desaprovechado pro meses pero para atención de asintomáticos?, ¿Por qué Bogotá no ha evidenciado la adquisición suficiente de ventiladores. Puntualizo la cabildante