Incremento en Transmilenio no afectará a población vulnerable

A partir de este lunes, dos de marzo, la tarifa del pasaje del sistema de transporte masivo en Bogotá se incrementó, a $2.500 para Transmilenio y a $2.300 para SITP.

“Hemos venido haciendo unos análisis muy importantes que buscaban entender cuál era la sostenibilidad necesaria del sistema, no estamos prestando el servicio que queremos en la ciudad y entiendo que haya un poco de malestar, pero todo esto que hacemos, hace parte del compromiso que tenemos con el usuario y con el mejoramiento de Transmilenio”, dijo Felipe Andrés Ramirez gerente de Transmilenio en dialogo con el SIA – Sistema Informativo Auténtica

Así mismo, aseguro que en el marco de este aumento en el pasaje, la población más vulnerable de la ciudad no se verá afectada. “Las personas en condición de discapacidad, ni los adultos mayores, ni aquellos con un Sisben entre 0 y 30,5 puntos. Quisimos beneficiarlos y esto nos ayuda en la reconciliación que queremos tener con el usuario. Además, pasamos la ventana de tiempo de transbordo donde la gente tiene la posibilidad de hacer transbordos sin costo adicional, de 95 a 110 minutos para garantizar que las personas que viven lejos o en la periferia, no tengan que pagar un nuevo pasaje sino que con el mismo, hacer esos transbordos”.

El gerente de Transmilenio, además destacó la buena noticia de la implementación de 130 buses biarticulados a gas que entran a integrar la flota. “Vamos poco a poco dando pasos por el sistema, completamos ya 1.075 buses rodando y en agosto llegaremos a 1.441, que nos ayudaran a mejorar la prestación del servicio en la ciudad”.

Recordó además que fueron en total seis mil millones de pesos los que debieron invertirse en la reparación de las estaciones vandalizadas en las recientes manifestaciones y que a finalizar el mes de marzo espera que se haya cumplido con el arreglo en su totalidad. “Los bogotanos debemos ser conscientes que el daño a las estaciones lo debemos pagar de nuestro bolsillo, y aunque no estamos en desacuerdo con las marchas, el llamado es a que no se dañe el sistema que presta servicio a los más vulnerables”.

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